Las mazmorras serán experiencias aparte e individuales. Aunque no se vean a otros jugadores, existe la opción de formar un grupo de hasta cuatro jugadores para hacer frente a mayores desafíos y acceder a mejores recompensas.
Como caracteriza a la franquicia de Diablo, las mazmorras serán experiencias aleatorias, tanto por su diseño como por los sucesos que pueden ocurrir en ellas. Habrá paisajes interiores o exteriores, a veces se mezclarán distintos entornos y, en todo caso, ofrecerán posibilidades de exploración continua, pues moverse entre niveles o escenas es ahora un proceso natural sin pantallas de carga.
Además, hay objetivos de mazmorra que os guiarán por la aventura y os ofrecerán mejores recompensas a cambio de mayores peligros. A medida que completéis objetivos de mazmorra, se actualizarán las metas, y la propia mazmorra podría responder con enemigos y retos más complicados. Cada objetivo se ha diseñado individualmente para que las mazmorras tengan una identidad propia, ¡y hay más de 150 mazmorras con montones de eventos para que cada aventura sea distinta!
Las mazmorras al final del juego evolucionan en torno a tres pilares: variedad, profundidad estratégica y capacidad de intervención de los jugadores. Por ello se introducen los sigilos de pesadilla. Al encontrar crear un sigilo de pesadilla en el ocultista, podréis mejorar una mazmorra existente a una versión especial de la misma con mayor dificultad, mejores recompensas y afijos de mazmorra.
Su aleatoriedad natural, su dificultad elegible y la variedad de afijos son los pilares para ofrecer contenido de final de juego variada y en constante evolución.
Mazmorras
Cimas Quebradas
Estepas Adustas
Kehjistan
Hawezar
Scosglen
- Bastión de Garan
- Caverna Sumergida
- Cuevas Desgraciadas
- Túneles de Domhainne