Llevamos ya más de medio año con Diablo IV oficialmente en nuestras manos, casi dos temporadas completas y una barbaridad de cambios desde el lanzamiento. No se puede decir que el equipo de desarrollo no esté escuchando a la comunidad y haciendo cambios para mejorar el juego. Cambios que llegan rápido, eso sí, pero no siempre llegan todo lo bien que querríamos...
Un comienzo accidentado
Diablo IV no salió cuando debería... Por unas razones u otras, la fecha de salida se fijó para el 6 de Junio de 2023, aunque luego supimos que originalmente estaba planeado para 2022. Si ya salió con problemas en 2023, imaginad si hubiera salido un año antes...
Hay una cosa que sí salió muy bien: los servidores aguantaron la marabunta de jugadores de forma bastante decente. Nada que ver con los horribles lanzamientos de Diablo III y Diablo II: Resurrected. Tras algún traspiés pequeño, todos pudimos empezar a jugar casi desde el minuto uno. No en vano, hicieron múltiples pruebas de estrés en los servidores que les ayudaron a arreglar todos los problemas.
Cuando tu vas, yo vengo
Pero esto vino de la mano de otros problemas dentro del juego que obviamente no pudimos ver en las betas, ya que sólo llegaban a niveles bajos. Sólo en los primeros 7 días desde la salida sacaron 7 parches arreglando problemas de estabilidad y alguno de balance.
Por si no os acordáis, tuvimos que lidiar con mazmorras tediosas, con múltiples zonas muertas, con caminatas para ir y volver y unos objetivos muy aburridos. Con la primera temporada, llegó el parche 1.1.0 que destrozó a todas las clases con cambios de balance masivos y, en general, una reducción de poder y experiencia para todas las clases.
Problemas con el renombre, los altares de Lilith, el mapa... Tuvieron que retocarse enseguida para hacer más llevadero el comienzo de temporada. Luego tuvimos algunas decisiones incomprensibles como aumentar a 5 segundos el tiempo de salir de mazmorra o bajar el nivel de los enemigos en mundo abierto a -5 niveles de diferencia. Han dado muchos bandazos, hecho y deshecho, y la sensación que teníamos los primeros meses es que no tenían una visión clara para Diablo IV y estaban dando palos de ciego.
Banco de pruebas
Con Diablo IV (y con Diablo Immortal), Blizzard está siguiendo una estrategia distinta al resto de juegos: no hacer pruebas públicas. Al no tener acceso a una versión de pruebas, todos los cambios salen tal cual. Ya sea por falta de recursos, o por falta de ganas, muchos cambios no son como deberían ser y muchos errores se cuelan en el juego final.
Blizzard dice que es para que todos veamos las novedades al mismo tiempo, pero si estos cambios vienen de la mano de bugs y problemas, nos encontramos un panorama desolador. Las noticias negativas vuelan y se hacen con el control de la conversación en la comunidad. Por mucho que el Matadero de Zir sea una interesante vuelta de tuerca al endgame, todos hemos estado hablando de las 300h que se necesita(ban) para subir el glifo a nivel 50. Todos hemos hablado de lo mal balanceados que están los buscadores de sangre. Todos hemos hablado de los enemigos que te matan de un golpe... Han reaccionado rápido, sí, pero el mal sabor ya se queda para siempre.
Esto no es bueno para el juego, que recibe mala publicidad constantemente. Ya sabemos que, hoy en día, en internet se premia la negatividad, ya que es lo que más beneficios da. Pero Blizzard tiene que saber ver más allá y adelantarse a estas situaciones.
¡PTR YA!
Los desarrolladores no parecen tener interés en hacer un PTR. Por supuesto, esto necesita tiempo y recursos, pero estamos viendo que no son capaces de sacar parches lo suficientemente probados para estar listos. Hemos tenido problemas muy gordos durante estos meses: corazones malignos en no temporada, comercio entre temporada y no temporada, caída de objetos superúnicos aumentada (algo que quitaron enseguida), problemas de balance con el eco de Lilith, problemas con los cofres de mareas infernales, cantidad de aceros vivientes insuficientes, experiencia de glifos insuficiente (sobre todo en el Matadero de Zir), mazmorras de pesadilla aburridas... y seguro que me dejo alguno más.
Todo esto sin hablar de otros problemas de cuelgues, cierres, congelaciones constantes... ¡cuánto hemos tenido que esperar para arreglar el problema del parpadeo de descripciones de objetos! ¡cuánto están esperando en consola para poder comerciar con oro fácilmente!
El juego tiene mucho por delante y hay que alabar la rapidez con la que están haciendo estos cambios, pero esto no es suficiente, nos merecemos parches pulidos y listos para el juego final, nos merecemos al menos tener la oportunidad de darles los comentarios necesarios en un entorno seguro como es un reino de pruebas, nos merecemos lo que siempre hemos tenido en Diablo III (y otros juegos de Blizzard): un reino público de pruebas de al menos una semana para que, en un juego tan complejo, se puedan probar multitud de interacciones y descubrir la mayor cantidad de problemas antes de que afecten al juego principal.
Temporada 3
Y esto se agravará todavía más cuando en la temporada 3 tengamos tablas de clasificaciones. Si hay exploits o problemas que vayan a trastocar estas clasificaciones, nos veremos todavía más afectados por cualquier problema que no se haya podido atajar a tiempo. Obviamente siempre habrá algo que se escape, pero cosas tan fáciles de probar como si las hidras cuentan como muertes para el Matadero de Zir no se hubieran colado...
Vale que Blizzard no sepa o no quiera tener a sus testers buscando este tipo de problemas, pero tiene una comunidad dedicada que sabrá aprovechar un PTR, siempre lo hemos hecho.
Ojalá sepan ver la necesidad de un PTR en condiciones para Diablo IV y lo tengamos en el futuro. No queremos tener más errores graves con parches o sistemas poco pulidos sólo por querer responder rápidamente a la comunidad.
Perdonad los memes, pero era la mejor manera de ilustrar este artículo 🙂